Spencer Tunick, Dead Sea, 2016. Imágenes cortesía del artista
El mar Muerto se está muriendo y el artista Spencer Tunick utiliza sus polémicas fotos de desnudos para denunciar la triste situación. Durante un encuentro de prensa hace unos días presentó una nueva serie de fotos donde vemos a 15 modelos desnudos interactuando con sumideros que están causando estragos sobre el paisaje alrededor del mar Muerto.La serie de Tunick representa una acción artística de denuncia similar a la que presentó en julio durante la Convención Nacional Republicana de los EE. UU. en la que participaron 100 mujeres desnudas. "Para esta obra se presentaron 300 personas, pero escogí solo a 15 para hacer una obra a menor escala", explica el fotógrafo a The Creators Project. "No teníamos permiso así que fue tuvimos que hacer un trabajo rápido. Lo hicimos a escondidas para que no nos detuviera o atacara algún manifestante". Tunick sitúa a los modelos cerca de sumideros en formaciones surrealistas, a veces incluso medio enterrándolas en la arena para "acercar la piel lo más posible hacia el problema".
Publicidad
Sumidero en el mar Muerto
Los modelos nunca estuvieron cerca de sufrir ningún peligro, cosa que no se puede decir del mar Muerto. Según el Estudio Geológico de Israel, los sumideros aparecen como resultado del agua que se desvía del Mar de Galileo y el río Jordán hacia Israel y Jordania, haciendo que el mar Muerto pierda más de un metro de agua cada año. Según las cuentas de Lipchin, aproximadamente cada día aparece un nuevo sumidero que representa la posibilidad de una nueva residencia o carretera en las proximidades. "El lago está haciendo honor a su nombre", nos dice Lipchin, "Se está muriendo".
Una señal de advertencia para los visitantes cercanos a un sumidero
Pero esta no es la primera vez que Tunick lleva sus fotografías hasta el mar Negro. En 2011 hizo una serie de fotos en una zona conocida como Mineral Beach (que lamentablemente ha dejado de existir a causa del descenso del volumen de agua). En esta obra, titulada Dead Sea, vemos 1.200 cuerpos desnudos flotando sobre el agua. Las imágenes surrealistas despertaron la admiración de sus fans pero también la indignación de la población local con su mentalidad conservadora.Los legisladores israelís llegaron a proponer una ley llamada la ley Spencer Tunick para acabar con la protección de los desnudos en el arte. La ley no fue aprobada pero desde entonces Tunick sigue siendo una persona non grata a los ojos de muchos israelís.
Spencer Tunick, Dead Sea, 2011
"El mar Muerto me apasionaba ya desde niño", dice Tunick. Hasta su juventud solía visitar a sus abuelos, que se mudaron a esta región a finales de los 60. "Es el mismo tipo de afecto que pueden tener los norteamericanos por las maravillas de la naturaleza de su tierra, como los árboles sequoia. Si todos estos árboles estuvieran en peligro de extinción haríamos todo lo posible por salvarlos".
Publicidad
El objetivo de Tunick es generar un debate lo suficientemente importante para que el gobierno israelí se vea obligado a tomar las medidas necesarias, que según Lipchin deberían conllevar el bombeo de un billón de metros cúbicos de agua —el equivalente a la mitad del consumo anual de Israel— desde el mar Mediterráneo hasta el mar Muerto. Lipchin imagina un túnel subterráneo similar al paso del tren que une París y Londres, que podría generar también energía hidroeléctrica para una planta desalinizadora y llevar más agua fresca hasta Israel y Jordania.
Spencer Tunick, Dead Sea, 2016.
Lipchin lleva más de 15 tratando de defender el mar Muerto y admite que su plan no es perfecto y tiene dudas sobre la mezcla de la composición química de los dos mares, pero lo que tiene claro es que hay que hacer algo y pronto. "Los ingenieros saben cómo hacer estas cosas. Se puede hacer y ha de hacerse en otras partes del mundo", dice. Cree que el acuerdo que alcanzaron Israel y Jordania el año pasado para la construcción de una tubería del mar Rojo al mar Muerto avanza demasiado lentamente para poder salvar el lago. "No está haciendo nada", dice, "Cada año perdemos un nuevo metro y aparecen nuevos sumideros".Esperemos que con acciones como esta se pueda llegar a encontrar una solución.
Al inscribirte en la newsletter de VICE, aceptas recibir comunicaciones electrónicas de VICE que en ocasiones pueden contener publicidad o contenido patrocinado.
