Este vídeo titulado Alguien voló sobre Islandia (One Flew Over Iceland) se abre literalmente sobre una orilla cubierta de hielo y bañada por la luz del atardecer, que se extiende sobre las suaves olas del océano y los bloques de agua helada sobre la arena. En el corto de Igor Byrko la cámara montada en un drone se mueve con fluidez sobre paisajes congelados de terrenos, montañas y estructuras naturales y artificiales, manteniendo a los espectadores bajo temperaturas heladas a través de todo el país islandés.
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