Las chicas de la vida real lloran frente a su webcam

Dora Moutot es la creadora del sitio La Gazette du Mauvais Goût, y también es una rigurosa periodista que chambea para Le Monde, WAD, Glamour, y un chingo de publicaciones que explotan su talento para sorber las tendencias más vergonzosas que emergen de la faz de la Tierra.

Además de este sitio, Dora también tiene muchos proyectos anexos, como “Webcam Tears”, un Tumblr que abrió hace dos años, y donde —con la ayuda de su webcam— se graba mientras llora. El proyecto ha sido replicado, y muchas chicas empezaron a filmarse mientras derraman litros y litros de lágrimas, antes de enviar ese momento de intimidad a Dora.

Este sábado, a partir de las 20:30 horas, Dora proyectará todos estos videos en Salon, en París, pero como somos pobres y no podemos estar allá, hablamos con ella sobre esta hermosa pendejada, de la cual queremos saberlo todo.

VICE: ¿Qué es esto de “Webcam Tears”?
Dora Moutot: Es un proyecto que inició en Tumblr hace dos años, donde hice un llamado a las chicas que lloran, porque yo misma lloro un montón frente a mi webcam.

¿Por qué haces eso de compartir tu miseria?
No, para nada, es solamente que soy un poco egocéntrica como chica.

Simón, eres una narcisista 2.0.
Sí, y lo asumo totalmente. Tengo habilidades con la webcam, ella y yo nos conocemos bien, nos apreciamos mucho entre otras cosas porque cuando yo tenía 16 años lloraba un chingo frente a mi computadora. Me sentía sola, y para no tener ese sentimiento de soledad, empecé a grabar mis lágrimas. Eso se convirtió en una especia de automatismo: cada vez que lloro, prendo mi compu y la presencia de mi webcam —su mirada— me reconforta, como un compa que me hace un cariñito.

¿Por qué berreabas tanto cuando tenías 16?
Porque era muy mala para la escuela, me expulsaron, fue una catástrofe. Fue así que empecé. Lloro súper fácilmente.

¿Quieres decir que lloras por obligación?
No, no sé hacer eso, pero es muy fácil hacerme llorar, soy hipersensible. Al principio me daba vergüenza o intentaba contener las lágrimas. Luego, un día, decidí dejar de avergonzarme por eso.

¿Qué clase de cosas te hacen llorar?
Todo. Veo una situación triste en la calle y ya tengo lágrimas saliéndome de los ojos. Una melodía, un email tosco… Veo todo como un melodrama. Basta que un güey me cancele una cita a último minuto para encontrarme en un estado insoportable, llorando en mi cama, incluso si dos horas después olvidé completamente al vato. Tomo todo de manera muy extrema. A grandes rasgos así empezó todo, con esa interacción con personas y el hecho de que ellas encuentren denigrante ver a alguien que llora enfrente de ellas. Eso me interesa y juego un poco, soy un poco perversa. Me da placer cuando las personas no saben cómo reaccionar. Y luego, lo que encuentro interesante de Internet, es que puedes encontrar todo, pero nadie se etiqueta en imágenes en las que aparece llorando. Incluso en Facebook, cuando alguien pone un status melodramático porque está triste, todos se cagan de risa de esa persona. Eso es lo que me motiva, el hecho de que no podamos mostrar esos sentimientos negativos, la tristeza, en internet.

En general denuncias el hecho de que uno no pueda responder “No” a alguien que pregunte “¿Estás bien?”…
Sí, es eso. Mira, yo tenía videos donde aparecía llorando y así empecé este proyecto, de manera espontánea, depositando mis lágrimas en la web. Y en Tumblr hay morritas medio feministas, las chicas de Rrrriot Girls 2.0 con las greñas rosas y piercings en la nariz, ultra narcisistas, que se toman fotos todo el tiempo. Esperaba que ellas respondieran a esto, y lo hicieron. Molly Soda, una de las grandes estrellas de Tumblr, hizo su video y puso un link. A partir de ahí, tuve diez videos en tres días y luego, poco a poco, el proyecto fue mencionado por Buzzfeed, el Huffington Post, etcétera. Y enseguida me empezaron a seguir un chingo de blogs feministas.

Ah sí, quería que me explicaras eso. Vi que algunas chicas hicieron un análisis feminista de tu Tumblr, como para ver si tenía un significado profundo, mientras que yo sólo veo en él un proyecto cagado y menso.
Sí… Al principio me dije: “Órale, voy a chillar, me vale madre lo demás”, y muchas chicas tomaron eso como: “No, yo no tengo vergüenza de llorar, nuestra debilidad también es una fuerza”. Fue así como llegué a blogs feministas ultra hardcore y a Thought Catalog también. Las personas se encontraron con la idea de que las chicas no deberían comportarse como hombres, ni hacerse las duras, sino asumir que ellas lloran más que los güeyes y que eso es también un tipo de fortaleza. Y luego eso se integró a un movimiento feminista en Tumblr, con fanzines como Girls Get Busy, pero eso no era lo que yo quería realmente en un principio.

¿Cuántos videos has recibido en un año?
Cerca de 75 videos de morras llorando —y alrededor de cuatro o cinco de güeyes, que son claramente gays—. Muy pocos chicos se han animado a mandarme videos.

¿Estás segura de que son lágrimas reales, las que aparecen en los videos que te mandan?
Los de lágrimas falsas los borro. Una vez me llegó un video de dos chicas que se pusieron a llorar al mismo tiempo mientras veían una película: eso no me interesa. Me gusta cuando la chica está sola. Las lágrimas de cocodrilo se notan, hay algunos videos en los que tengo dudas porque las chicas son muy bellas, y están perfectamente maquilladas y el rictus de la cara no les hace verse tan sinceras, están demasiado conscientes de su imagen. Se nota que intentan verse bonitas mientras chillan mientras que en otras, ves realmente que no la están pasando bien, que se les están yendo las cabras, y eso es lo que me gusta de verdad. También me llegan muchos de chavas que me mandan videos y luego me dicen: “No, mejor no lo subas”, o que borran el video de Youtube.

Tienes más sorpresas de tu proyecto, ¿no?
¡Sí! Me di cuenta de que el proyecto estaba rolando entre una gran comunidad de sadomasos. Hay un chingo de blogs y redes sociales que toman cosas de mi Tumblr, y de pronto mis videos están entre dos de morras babeando con un ball gag en la boca, amarradas sobre una parrilla, con comentarios de güeyes, tipo: “Me la quiero coger”.

¿Lloras nomás de ver videos de chicas que lloran?
No, ni al caso. Es parte de esto, es mitad chistoso y mitad triste. Mi conducta ya es demasiado perversa.

¿Hay algún video que te haya conmovido particularmente?
Sí, uno de una chava que se rompe totalmente, y se ve. Te preguntas si no se va a suicidar de tanto que se la está cargando la chingada. Tiene un aire bien triste. Luego hay otros que me parecieron chistosos. Como el de una morra que me mandó un video donde se le ve una chichi. O sea, ella estaba llorando pero su chichi se le salía del camisón. La neta no entendí. Otra lloraba en su baño. También hay unas que hablan mientras lloran, que cuentan por qué lloran. La mayoría del tiempo, las chicas no explican las razones de su dolor. De hecho no me interesa saber eso.

¿No te da curiosidad preguntarles de qué lloran?
No, creo que lo más interesante es ver los gestos de cada quién. Pero a veces sí hay quien dice “Mi güey me dejó”, o “Mi papá se murió”.

¿Hay uno de “Mi papá se murió” en la expo?
Sip. También el de la teta al aire, y el de la chava del baño. No aparecen todos los videos pero sí hay muchos. Unos cuarenta, yo creo.

¿En total has recibido 75 videos? ¿No te enfadas?
No, he recibido más. Por ahí del número diez dices: “Ok, sí aguanta”. Luego hay unos llantos desesperantes que dices: “Ah qué la chingada, ¿esta morra va a llorar o no?”, más o menos como cuando pones una porno y dices: “¿Ya mero?” Es parecido.

¿Continuarás con el proyecto?
Sí, claro.

¡Gracias, Dora!

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