FYI.

This story is over 5 years old.

cine

Estos mandalas relucientes no son cristales, son organismos microscópicos

Klaus Klemp resucitó una forma de arte victoriana para crear estos detallados biomandalas microscópicos.

Imágenes vía

Resulta difícil de creer que la gran tradición de arte creado gracias a las posibilidades de un microscopio, que recientemente hemos visto representado en obras como el castillo de arena de Vik Muniz (gravado sobre un solo grano de arena)el vídeo musical filmado con microscopio de Zammuto y las nanoflores de cristal que florecen en Harvard, empezó en realidad como un pasatiempo de los primeros científicos victorianos. Inspirándose en estos antiguos biocreativos, el diatomista Klaus Klemp ha pasado casi una década descubriendo, imitando y mejorando esta forma de arte para crear su impresionante set de mandalas formados por microorganismos.

Publicidad

Las diatomeas que Klemp estudia son algas unicelulares, de las cuales hay cerca de 100.000 especies distintas con formas y colores diferentes. Las diatomeas son de especial interés para Klemp, y lo fueron para los mencionados victorianos, porque están cubiertas de caparazones cristalinos similares a piedras preciosas que brillan como joyas orgánicas cuando se colocan por debajo de una lente. Klemp organiza sus mandalas de diatomeas utilizando un equipo completamente analógico: un microscopio y un par de pincitas. Los patrones detallados son el resultado de su increíble destreza y paciencia y de la belleza geométrica natural de las diatomeas.

Según Klemp, estos fascinantes seres unicelulares pueden aparecer casi en cualquier lugar de la naturaleza. "Ya sea el abrevadero de un caballo, una acequia o una alcantarilla, allá donde haya agua vale la pena echar un vistazo", dice en The Diatomist, un breve documental de Matthew Killip. En el vídeo, Killip explora la resurrección que Klemp hace del medio, así como el elaborado proceso de recoger, limpiar, organizar y disponer cada set de diatomeas.

A continuación, disfruta de las obras fruto del meticuloso trabajo de Klemp, muchas de las cuales podrían acoplarse cómodamente a la punta de un clavo, y no te olvides de ver el documental completo de Matthew Killip sobre el artista responsable de estas microestructuras, The Diatomist.

Visita la página web de Klemp para más información sobre las diatomeas y la cultura que se esconde tras esta forma de arte microscópico.

Publicidad

Vía Colossal

Artículos relacionados:

[Vídeo] Colonies, Vik Muniz y Tal Danino transforman células vivientes en arte

Unos investigadores crean un micro Monet del tamaño de un protozoo

Timelapses de naturaleza microscópica en todo su esplendor (y repugnancia)