La última odisea de Omote (Nobumichi Asai) fue transformar el rostro de una modelo usando videomapping. Ahora se arriesgó a hackear el rostro de dos hombres, aplicando su cuidadosa técnica de seguimiento de rostro y proyección 3D. Omote los transforma en androides, guepardos, subwoofers e incluso en otras personas a través de la combinación de luz, la captura del movimiento y la proyección de imágenes generadas por computadora.Así como en el proyecto previo de Omote, son escasos los detalles sobre cómo se logra este efecto de transformación facial. Lo que sí sabemos es que junto a un equipo compuesto por artistas de maquillaje, diseñadores de gráficos computarizados, escáner de datos 3D, coreógrafos, expertos en proyección, arquitectos de sistemas y directores técnicos, la impresionante habilidad de Omote para transformar por completo rostros humanos cobra vida.