La canción dance que hace llorar a Tiga

Escuché por primera vez el edit de "Elle et Moi" de Max Berlin del año 1978 alrededor de 2003, cuando fue publicado en vinil – esto en los días de gloria del electro, fue un tiempo muy placentero y abierto en la música-y recuerdo haber pensado "este es un track hermoso". Es un ejemplo de un disco que siempre me ha gustado a lo largo de mi vida, a mí me parece que la luz se encuentra en los discos de música dance emotiva. Yo los llamo discos para la mañana, ya que definitivamente son discos que tocas en la mañana, y son discos que únicamente puedes tocar si son muy buenos. Para tocar este disco, el estándar de la fiesta tiene que ser muy alto, tiene que estar muy bien trabajada, todo lo que no es puro y sorprendente tiene que ser apagado para que funcione. Es lenta. Va a 116 beats por minuto, es muy delicada, es un disco para la mañana.

En ese momento de mi vida, comenzaba a viajar internacionalmente, mezclaba mucho, viajaba mucho y hacía muchos amigos nuevos. 'Elle et Moi' no era un track de esa época que fuera tan importante para mí, lo fue posteriormente, y en varias ocasiones desde aquél entonces, en algunas muy buenas fiestas la he tocado hasta el final porque es muy hermosa. Es un gran ejemplo del ciclo que muchos discos atraviesan. Aquí tienes un disco que se publicó originalmente en 1978, y en esos años esta era una canción que no se conocía en realidad, en los ochentas, pero muchos de mis amigos sí – digo, claro, es un clásico. Pero el edit era muy nuevo para mí, era un disco que pertenecía a una era de discos que no conocía-casi como la definición de un clásico perdido.

Es muy cinemático, muy tranquilo, y comienza con unos chasquidos de dedos geniales. He copiado lo mismo en un par de cosas, de hecho. Tiene unas cuerdas hermosas, acordes enormes y unas vocales hechizantes. Hay discos clásicos post-disco de los ochentas que son un poco musicales, pero al mismo tiempo bailables-hay un beat consistente, es buena para bailar, está hecho como un disco dance. Es un disco en el que puedes confiar cuando todos están en un estado elevado-no es un disco con una energía enorme y poderosa, es más como un disco para el que tienes que estar de humor.

Hay muchos músicos, bandas, y gente que hacen música hermosa cuando hay mucho ocurriendo, los arreglos están muy llenos, hay muchos cambios y te pierdes-no es lo suficientemente hipnotizante. Por otra parte, hay mucha música dance que es muy repetitiva y funciona, pero le hace falta ese genio, o esa musicalidad-ideas creativas extrañas que la hacen resonar. Los que tienen ambas partes, son discos muy mágicos.

Las veces que he tocado este sorprendente disco siempre han sido momentos muy especiales, en fiestas muy buenas. Puedes tocar en cientos de fiestas al año, durante más de veinte años, habrás tocado en miles de fiestas, pero tal vez hay cuatro, cinco o seis donde sacas verdaderas joyas-esos son los momentos realmente especiales. No se trata de tocar en el lobby del hotel, o en una sala chill out o algo así. Se trata de tocarla en el momento cuando levanta a todos en realidad, cuando puede desempeñarse. Encontrar algo un poco diferente, un poco alejado del camino maltrecho, un poco extraño y hacer que eso funcione de la mejor forma y con un buen sentimiento.

Se han perdido las cosas últimamente en el caos de tanta música tan enérgica, y la gente olvida que la dinámica dentro de una noche es muy importante. Obviamente todos saben cómo funciona la hora pico, y todos se ponen locos, y eso es increíble y difícil de superar. Pero también, lo que es muy cool es esto; imagínate una fiesta underground con cinco, seis o setecientas personas – en la madrugada. Imagínate el disco de Max Berlin, el cual es pacífico durante la mayor parte-hay mucho espacio en él, mucha profundidad. Tener la capacidad de tocar esa música hermosa en ese momento es de las cosas más geniales del mundo. Escuchar el silencio llenar el espacio, y esa emoción dentro de la música dance, es algo muy especial. Es simplemente como decir; habla suavemente pero carga con un cuchillo.

Tiga

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