Las tostadas son como los tacos: tan sencillas y tan complejas a la vez. Son un platillo mexicano completo, balanceado, sabroso, que va bien con todo y que queda bien en todo tipo de ocasiones.Es fácil hacer una buena tostada. Primero, la base, la tostada (tortilla de maíz frita u horneada) debe estar crujiente, no aguada, no rancia. Luego, debe haber un elemento que sirva como pegamento entre la tostada y el elemento principal. Por ejemplo: frijoles refritos + tinga de pollo, o guacamole + salpicón. Después, hay que tomar en cuenta que todos los elementos que integran la tostada deben estar bien picados: jitomate en cubos, cilantro picado finamente, carne desmenuzada. Esto es importante para que, a la hora de morder la tostada, se caiga la menor cantidad posible de comida. Y, según nuestro amigo el chef Diego Pérez Turner del restaurante Temporal en la Ciudad de México, todas las tostadas deben llevar un poco de crema fresca y pimienta negra recién molida.Diego compartió con nosotros su receta para hacer tostadas de salpicón de marlin con guacamole y nos enseñó todos esos pequeños trucos para hacer una buena tostada, y también para comerla: en la menor cantidad de mordidas posible. Si te tardas en comer una tostada, se aguada, se arruina.
Son ligeras, rápidas, frescas, fáciles de hacer y deliciosas. Quedan bien para una cena romántica, para una comida casual o para curar una cruda. Estas tostadas de salpicón de marlin con guacamole son una joya.