Cada año con una estridente explosión comienza la Feria Renacentista Americana. Cientos de artistas y performers que dedican su vida a esta celebración, le dan vida a un enorme festival con atracciones tradicionales del medievo y prácticas renacentistas. Arlequines se codean con los docotores de la peste y personajes silvestres conviven con elfos y seres fantasiosos.A pesar de la diversión y la felicidad que se experimenta en este festival, muchos de sus performers han encontrado un refugio en esta comunidad, dejando lastres sentimentales en el pasado para convertirse en personajes emblemáticos de aquella época antigua.
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Inmerso en las profundidades de la naturaleza, este festín invita a re-pensar en la unidad y en los valores comunitarios a partir de una experiencia original. No solo por ser parte del festival, sino por todos los esfuerzos en común que mantienen viva, aunque sea por unos días, la lejana realidad de armaduras y herejías.Mira algunas tomas del festival y el documental de esta distintiva celebración.
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