Qué es más caro, ¿jugadores de futbol o piezas de arte?

En términos económicos, el 2015 fue un gran año para el arte. En febrero “¿Cuándo te Casarás Conmigo?” de Paul Gauguin se convirtió en la obra más cara, cuando se vendió a 300 millones de dólares. Unos meses después, Les Femmes d’Algers de Pablo Picasso, se vendió por 179 millones en una subasta, algo nunca antes visto.

Así que por ahora, el arte está ganando. El jugador de futbol más caro, el galo Gareth Bale, fue vendido al Real Madrid por 100 millones de euros en el 2013. En 2015, el jugador más caro fue el belga Kevin de Bruyne, vendido al Manchester City por 75 millones de euros—lo que corresponde a un cuarto del precio de la pintura de Gauguin.

Pero, ¿por cuánto tiempo los Picassos superarán el precio de los jugadores? Los clubes tienen el poder de establecer precios por un jugador que un Gauguin no podrá alcanzar—Manchester City, conformó recientemente un equipo que cuesta 400 millones de euros. Gracias a una mezcla de jefes corruptos, falta de control y padrotes del futbol, las cifras para una transferencia siguen subiendo exponencialmente. Y mientras el futbol es el deporte favorito mundial, ningún jugador tiene permanencia infinita como un Picasso o un Van Gogh.

Este incremento absurdo se puede visualizar fácilmente en esta gráfica. Si la tendencia actual se mantiene, el jugador más caro del 2025 costará más de 160 millones de euros.

De izquierda a derecha: Denilson (1998: 30.9 millones), Vieri (1999, 43 millones), Figo (2000, 62 millones), Zidane (2001, 75 millones), Ferdinand (2002: 44.8 millones), Beckham (in 2003, 35.9 millones), Rooney (2004, 39.4 millones), Wright-Phillips (2005, 30.5 millones), Shevshenko (in 2006, 43.8 millones), Robben (2007, 36 millones), Robinho (in 2008, 42.5 millones), Cristiano Ronaldo (2009, 94 millones), Villa (2010, 40 millones), Torres (2011, 58 millones), Thiago Silva (2012, 44.4 millones), Bale (2013, 100 millones), Suarez (2014, 93.7 millones) and De Bruyne (2015, 75 millones)

El mercado del arte también se encuentra a la alza. Además de los ya mencionados, se encuentran Paul Cezzanne con Los Jugadores de Cartas y Los Tres Estudios de Lucien Freud de Francis Bacon, también rompiendo records estos años.  Aquí hay una gráfica del alza de precios en el arte durante estos 20 años.

De izquierda a derecha: Auto-retrato sin barba (Vincent van Gogh, en 1998, 82 millones), Naturaleza Muerta con Cortina, Jarra con Platón de Frutas (Paul Cézanne, 1999, 56.3 millones), La Mujer de los Brazos Cruzados (Pablo Picasso, 2000, 64, 4 millones), Masacre de los Inocentes (Peter Paul Rubens, 2002, 76.7 millones), Retrato de Alfonso d'Avalos (Titian, 2003, 59.8 millones) Garçon à la pipe (Pablo Picasso, in 2004, 85 millones) No. 5 (Jackson Pollock, in 2006, 147 millones), Centro Blanco (Mark Rothko, 2007, 54 millones), Tryptich (Francis Bacon, in 2008, 66 millones), Diana y Actaeon (Titian, 2009, 39.4 millones), Desnudo, Hojas Verdes y Busto (Pablo Picasso, 2010, 81.4 millones), The Card Players (Paul Cézanne, 2011, 245 millones), El Grito (Munch, 2012, 91 millones), El Sueño (Pablo Picasso, in 2013, 142 millones ), No. 6 (Mark Rothko, 2014, 166 millones), and ¿Cuándo te casarás conmigo? (Paul Gauguin, 2015, 264 millones)

Con cuatro precios record y un valor superior a 372 millones de euros, Picasso es el artista más prolífico en términos de valor. Su equivalente en el futbol, quizás podría ser Ángel di Maria. Con una cuota de transferencia de 188.7 millones de euros. Di Maria es el jugador considerado como el más caro de a historia. No aparece en la lista de transferencias individuales, pero ha movido cuatro clubes recientemente.

Así que pongamos las gráficas juntas.

Resulta que el arte es más caro que el futbol, y probablemente lo sea durante un tiempo. Después del cambio del siglo parecía que las dos líneas se cruzarían, pero estos días, parece que no será así. Si asumimos que las tendencias actuales persistirán, la pregunta es, ¿el precio de los futbolistas superará el valor del arte?

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