Stranger Things ha pisado los terrenos de la fama y la popularidad por muchas razones: excelente musicalización, una gran historia, su fotografía, la actuación de los niños y demás, un sinfín de aciertos que la fantasiosa producción llevó a límites creativos bastante altos.Uno de los detalles que más cuidaron en la serie fue la utilización de escenarios, paisajes e iluminación, todos con la intención de guardar la estética que caracterizó las producciones de aquellas décadas.
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Esta racha de misterio, cortesía de Stranger Things, ha provocado que muchas mentes creativas encuentren inspiración en la serie de los hermanos Duffer, y Tim Bennett con la compañía musical de Randy Newman, acaba de hacerlo muy bien.Lo que verás a continuación es un tributo bastante divertido hacia la serie. Seguramente ya la terminaste, así que te gustará revivirla por un rato antes de que puedas volver a hacerlo en Navidad.
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